El nuevo testamento del libro de libros posee tres principales ejes en su camino hacia la correcta pronunciación de la palabra "trompeta": El inmaculado embrión de lagarto 1,2, la interminable congoja Hitleriana 3-5, y los trece angulares intestinos delgados que cuelgan de cruces secretarias.
La primera de estas particulares demostraciones de eterna superioridad antropofágica se basa en la concatenación de líneas paralelas como si fuesen sombras en un espejo victoriano inundado en vómito aristócrata. Ahora, el espejo victoriano jamás había sido presa de la magna absolución intranacional 6 hasta la primera caída de la bolsa norteamericana, cuando millones de especulaciones brotaron de ventanas y chocaron con asfalto acelerando a 9.8 metrosporsegundocuadrado, generando indelebles cacofonías. La dama que cruzaba entonces la Avenida continúa siendo prueba de la teoría del caos pues sus cuerdas vocales se flagelaban para tomar la forma del pene de Jesús 7 o el parietal izquierdo de Barrabás. En lo anterior se basaron los constructores de castillos de arena teológicos; la falacia de asociar norteamericanos suicidas con pacifistas homosexuales judíos sólo por la semejanza en el sonido que generaron al conectarse con las avenidas más modernas del siglo veinte llevó a estos carpinteros del cuarzo a fecundar vírgenes falsas con antimateria, hija de enfermedades mentales propias del ser humano.8
La segunda tesis propuesta por el nuevo testamento recurrió a los rumores para esparcirse por el globo terrestre y tomó forma de dictadores socialistas alemanes, hombres que llaman al planeta una aldea, catástrofes sísmicas, triunviratos, y santas trinidades: El padre, el hijo y el espíritu santo recostados en una sauna planetaria que suda manifiestos antivanguardistas. No es posible, en este punto crítico, olvidar a los pintores más representativos del fiasco denominado criptorrafaelismo. El criptorrafaelismo surgió como una cola de lagarto tras el asesinato de todos los memes nazis bajo el “Mandato de Héroes de Guerra”. Se basa en trazos sensuales, la teoría de los colores opuestos como espermatozoides fosilizados 9 y la representación de Jesús de Nazaret como un delfín bidente -y no vidente, como manifestaron alguna vez los órganos internos de antiabortistas iracundos-. Es entonces cuando Adolfo Hitler y Rafael, en su glorificación de la superioridad del hombre blanco, han de retirarse a la alcoba contigua y practicar sexo anal hasta que sus próstatas exploten en unísono.10
El último, y quizás más importante, argumento que usa la segunda sección de la Biblia en su camino hacia la engañosa embriaguez de toda la raza humana tiene bases en la alquimia y las teorías del mercado. Trece cruces fácilmente encajan en los zapatos que adolescentes sin opción y sin himen, por pérdida igualmente involuntaria, ayudan a proporcionar a las potencias mundiales. Además de lo anterior, ocho por ciento de los documentos históricos usados por Napoleón para sonar sus narices han sido encontrados bajo, y no sobre, los pulmones de sacerdotes sin experticia en el arte de escupir fuego, hacer malabares, o caminar por la cuerda floja con lagartos colgando de sus brazos.
El Papa, por otro lado, besa la tierra 11, tiene hemorroides 12 y aloja a una sacerdotisa Africana en su joroba.13
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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3. D. G. Cogan, 'Eventos de vida y síntomas visuales de Hitler, Adolfo (con anécdotas personales)', Documenta Ophthalmologica 89, 9-13.
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8. R. Palmirotta, F. Verginelli, A. Cama, R. Mariani-Costantini, L. Frati y P. Battista, 'Determinación de Origen y Género de Sangre Seca en una Estatua de la Virgen María', Revista De Ciencias Forénsicas 43, 431-434.
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